¿Sabías que la Damiana era ya utilizada por los Mayas como planta afrodisíaca?
Esta planta proporciona energía al cuerpo, por lo que se utiliza en casos de agotamiento o depresión. Además, ayuda a mantener en buen estado el aparato urinario, por lo que se utliza en casos de cistitis, problemas renales y piedras en los riñones. Con respecto al aparato respiratorio, se utiliza para la tos, la bronquitis y los resfriados.
Propiedades de la Damiana
La damiana posee propiedades afrodisíacas, tónicas, estimulantes, antibacterianas, mucolíticas, expectorantes, diuréticas y laxantes.
Beneficios de la Damiana
La damiana actúa directamente como diurético, pero además, provoca excitación en toda las zonas erógenas y ayuda a despertar el apetito sexual de las personas que la consumen.
La damiana es una de las plantas más afrodisícas que se conocen, y es muy normal encontrar su extracto en preparados cuya finalidad esté destinada a favorecer las relaciones sexuales, siendo muy eficaz en casos de impotencia, eyaculación precoz, vaginismo, inflamación de testículos o emisión involuntaria de esperma.
También es efectiva para determinadas afecciones del aparato respiratorio, como la bronquitis, ya que desinflama los bronquios y favorece la expectoración, la gripe y la tos.
Constituye un buen remedio para algunas enfermedades del aparato urinario, como la cistitis, las infecciones renales y las piedras en los riñones.
Puede ser utilizada para dar energía y vigor al organismo sin que produzca ansiedad o sobreestimulación, por lo que se puede utilizar en el tratamiento de trastornos que afectan al sistema nervioso central tales como el agotamiento, la depresión leve o la depresión otoño-invierno.
En dosis bajas la damiana es un astringente que se puede utilizar para cortar la diarrea, pero a medida que aumenta la dosis, se va convirtiendo en laxante, y si se utiliza en dosis muy elevadas puede convertirse en purgante.